Sigo en mi desasosegado descreimiento político y al leer el artículo de la entrevista a Willy Toledo, ‘exiliado’: “Me he tenido que ir de España” , me recordó mi situación antes del 15M, donde llevaba votando Forges mas de una década fruto del ateísmo político mas radical, cuando digo votando Forges es que cogía una viñeta, que considerara mas adecuada con la situación del momento de la votación y para el congreso y otro tanto de lo mismo para el senado.
Seguramente mis motivos para ese descreimiento político tan absoluto, no sean ni parecidos, pues a mi me vinieron desde un perfil de militancia y activismo político mas bajo que el de el, ya que yo jamás había militado en partido político alguno, tan solo me había comprometido como simpatizante del PSOE, cuando la gran mentira de "OTAN no bases fuera", cuando las chaquetas de pana y los jerséis de punto con coderas eran mas habituales, en ese partido, que los trajes con corbata y que estos atuendos pasasen a ser solo los uniformes oficiales del partido para las campañas electorales. Compromiso que me duró solo hasta que ganaron las elecciones y los FILESAS, los GAL, los Roldán, los Juan Guerra, la ley de fundaciones y se diera el pistoletazo de salida a las privatizaciones, con la disculpa de los socialidemócratas europeos nos lo exigen, si queremos ser parte de Europa y el termino socialista empezó a quedarse relegado en el armario, como los trajes de pana y sacarlos solo para cuando se tocaban arrebato. Luego pasé a votar a IU, pero la alegría duró poco, tras observar que quitado al Califa (Julio Anguita), que era el único que sostenía la pinza y sustituido al profesor por el doctor, la beligerancia de este partido con el PSOE era mero postureo previo a elecciones, ya que el resto del tiempo se la dedicaban a repartirse las raciones en el pesebre de la Administración, dependiendo de lo grande y robusta fuera la bisagra en que transformó LLamazares la pinza de Anguita, por cierto en esos congresos sin primarias que se hacían de aquella y que hasta hace muy poco no se sabía ni lo que eran primarias y mucho menos abiertas.
Pero de repente el hoy llamado 15 M cobra fuerza y las plazas se llenan de gente pidiendo mas democracia y protestando por que sus representantes no les representan y solo los usan para en su nombre representar los intereses de otros, aparecen las PAHs encerrándose en oficinas bancarias que echan a las gentes de sus casas, los escraches a los que no escuchan las necesidades de la gente, el SAT y la invasión de fincas para dar trabajo a los jornaleros, y Sánchez Gordillo sacando sin pagar carros de la compra de un supermercado, para darlo a los que pasan hambre y comen gracias a los comedores sociales. De repente un grupo de chavales participantes activos de ese 15 M aceptan el reto de transformar las reivindicaciones del 15 M en proyecto político y sacan 5 eurodiputados y comienzan a asustar a sus retadores, nace PODEMOS y algunos vemos renacer la ilusión mas que la confianza en la política, pues "gato escaldado del agua fría huye", pero a medida que se van instalando en las instituciones, ese acto cobra fuerza en si mismo y por si mismo y pasa a ser el fin cuando al principio era solo el medio y hace que el proyecto se desvirtué y que la ilusión inicial disminuya.
Pero ojo no culpo a los chavales erigidos en líderes de partido, pues no son ellos los culpables del borreguismo de la gente que prefiere seguir a un líder que apoyar un proyecto, como tampoco culpo a los políticos corruptos, que siguen aupados en votos en los que respaldarse para no considerarse delincuentes, pues lo que hicieron, una mayoría de españoles no lo percibe el delito o lo considera parte de la acción política, que voluntaria y con conocimiento de causa escogió y considera la mejor. A día de hoy con la gran cantidad y variedad de casos que se han dado a conocer y con el detalle que se conocen, nadie puede sentirse engañado cuando opta por repetir su voto y cuando lo hace es por que da por bueno lo hecho y considera adecuados los comportamientos y las actuaciones, si votamos partidos que de antemano sabemos que nos venden programas electorales que ni van a intentar cumplir, lo justo es que obtengamos lo mismo que hemos votado, mentiras y engaños, estafas y robos, solo que como lo hicimos a sabiendas de ello ya ni hay engaño ni hay estafa ni siquiera robo pues cuando uno se predispone a que te lo quiten es imposible distinguir cuanto hay de donación y cuanto de robo. Para que haya violación no puede haber consentimiento y si se sigue votando igual no podemos quejarnos que siga pasando lo mismo. No podemos seguir echando indefinidamente a otros las culpas que son únicamente nuestras, ni tenemos derecho a quejarnos de que nos hagan lo que seguimos consintiendo.
